Dos horizontes encontrados.
Figuraciones de mundosposibles que no conocen caminos de
regreso
y que comprenden el lenguaje de los cielos y la memoria.
Los dos recorren la magia de la pintura
con la luz y
desde el silencio, son pintores, son lo que quieran ser.
Verdad y belleza.
Rubén piensa en las nubes que serán pájaros.
Simón piensa en la tabla de dorados atardeceres.
María José Castaño